Una vez hemos decidido que queremos comenzar la terapia, nos llega la cuestión de cómo elegir el mejor psicólogo para nosotros. Esta es una muy buena pregunta, ya que antes de ponerte en manos de un profesional, del tipo que sea, debemos valorar detenidamente (en el caso de que sea posible) las mejores opciones de las que disponemos.

Es normal que en algún momento de tu vida experimentes momentos de tensión, estrés, tristeza

más profunda… y es ahí cuando te planteas pedir ayuda psicológica.

Primero se lo cuentas a tu entorno, amigas, familia o incluso al médico de cabecera si lo consideras oportuno. Pero hay veces que no es suficiente con contarlo, esta vez necesitas algo más que desahogarte, y es entonces cuando te empiezas a plantear una ayuda profesional.

Últimamente oyes hablar mucho de ello en las noticias, conocidas, famosos…  ¡acuden al

psicólogo! ¿ahora ya se puede pedir ayuda psicológica?

Por suerte, comenzar un proceso terapéutico es un recurso cada vez más normalizado, aceptado y sí, necesario. Por fin estamos en un momento cultural y social, donde hablar de tus emociones y de cómo te sientes forma una parte importante de nuestro día a día. Hablar de cómo te sientes incluye cuidar tus relaciones, tanto con los demás como contigo misma. ¿Cómo tratas a los demás?, ¿cómo es tu diálogo interno?, es decir ¿cómo te hablas a ti misma?

Y precisamente ésas son algunas de las cuestiones, dilemas que se resuelven en terapia, en un proceso terapéutico cuidadoso, comenzarás a ser más amable contigo y con tu entorno. Aprenderás a detectar e identificar emociones que te molestan y en ocasiones podrás evitarlas, sin embargo, en otros momentos tendrás que enfrentarte a esas sensaciones. Será entonces, cuando gracias a tus sesiones con tu psicóloga o psicólogo, podrás hacerlo sabiendo cuáles son tus recursos, hasta dónde vas a poner interferir y hasta donde es cuestión de aceptar que la situación es esa y aunque duela, poder parar a lamerte tus heridas.

Tipos de psicoterapia

Hay distintos tipos de corrientes terapéuticas, es decir, distintas formas de intervención.

Psicoanálisis y psicoterapias humanistas

Dentro de las humanistas están la Gestalt, el Análisis Transaccional, Integrativa, sistémica

En este caso, la psicoterapia se centra más en el paciente, dan mucha importancia a cómo te relacionas con los demás y cómo te afecta. Se presta especial atención a las emociones, se marcan objetivos terapéuticos y no es tanto una única solución, si no comprender el origen de lo que te causa conflicto, darle un significado que tenga que ver más con el presente que con el pasado y adaptarte a tu situación actual. Fomenta la autonomía, sobre todo la autenticidad. Son procesos más largos, pero también los cambios que se producen se mantienen en el tiempo y se pueden aplicar en otras situaciones o problemas diferentes al que te ha traído a terapia.

Este tipo de psicoterapia es más amable con la persona tratada y se cuida enormemente la relación paciente-psicoterapeuta.

Conductual y cognitivo conductual

Tienen una forma de trabajo más directiva, racional, centrada en soluciones inmediatas y poco a poco van incorporando la importancia de las emociones. Se centran en cambiar conductas y pensamientos. Suelen ser procesos más cortos. Suelen tener una relación parecida a la de médico-paciente, donde el profesional sabe lo que hay que hacer y el paciente pregunta, pero también hay confianza en el profesional y se siguen sus consejos.

¿Qué psicóloga elijo?

  1. Lo primero, decide qué tipo de proceso quieres hacer, desde qué corriente, yo recomiendo intervenciones que sean algo más lentas pero que puedas aplicar en otras situaciones o conflictos, y sean mantenidas en el tiempo. Que miren el origen de porqué se creó ese “síntoma” que hoy intentas cambiar
  2. Habla con amigas, amigos, gente conocida, pregunta dónde han ido, cómo se han sentido
  3. Lee sobre esa persona que te han recomendado, formación, especialidades… reseñas y opiniones de pacientes que hayan pasado por ahí
  4. Mira cómo te sientes con esa persona, tanto en el primer contacto, como en las primeras Es muy importante que sientas seguridad y confianza, si no es así, busca a otra persona.

Ten en cuenta que va a ser
un proceso que va a tener
una duración en el tiempo,
no es puntual de un día.

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